Era la noche del viernes 9 de marzo y todavía estaba tratando de buscar la manera de que pudiera dar cuatro horas consecutivas de tutorías a un grupo de estudiantes de séptimo grado sin que se empezaran a inquietar y pelear entre sí. Las pasadas seis semanas han sido causa de frustración por esa razón y la supervisora ya me había indicado que calmara el grupo, ya que hacían mucho escándalo, lo cual traía más presión al asunto. Son esas condiciones las que me hacen más creativo todavía.
Haciendo una búsqueda por mi cuarto encontré mis dados que saqué de un juego de
role-play. Tomé dos y los utilicé para crear una actividad sobre exploración de potencias:
Un dado de 12 caras servía como la base y uno de 10 caras, donde contenía un 0, servía como exponente. Luego de que los alumnos arrojaban los dados, tenían que completar una tabla con lo siguiente:
- La potencia
- La notación multiplicativa de la potencia
- La base de la potencia.
- El exponente de la potencia.
- El valor numérico de la potencia
Tenían que hacer 4 tiradas, con dos de ellas asumiendo casos especiales: que la base era negativa y otra donde la base era el decimal
0.base. Luego de haberlo entendido, pasaban al cuaderno y ompletaban otra tabla igual, pero llenando los espacios en blanco.
Interesante por demás es que podíamos sacar todas las leyes de los exponentes, pero me desistí porque había puesto a los estudiantes en grupos de 2 y que los rotaba de actividad en actividad al pasar la hora.
La segunda actividad que presenté no fué idea mía, sino de mi maestra consejera cuando estaba en la práctica docente, la Sra. Ramos. Se trataba de armar una figura utilizando el rompecabezas chino, mejor conocido como el tangram y trazarla en un papel provisto.
Seguido, medían las longitudes de la figura plana para hallar su perímetro, aproximando toda medida al entero más cercano. De igual manera, trazaban y medían cada pieza del tangram por separado, para hallar el área total de la figura:
Si fuésemos a hallar el área total con las medidas exactas, la suma de las áreas de los dos triángulos isósceles grandes debería ser igual al área total de las otras cinco piezas; pero para probar que no importase la figura que formaran, al descomponer la figura en formas reconocibles de hallar su área debe dar al mismo resultado, las aproximamos.
Finalmente, quería un ejercicio de investigación y observación geométrica. Combiné el hallar puntos en el plano cartesiano con las clasificación de triángulos por longitud de lados y por ángulos.
Hallaban tres puntos en el plano, los conectaban y medían para clasificar por longitud, mientras que asumían cuál triángulo era por la medida de los ángulos, Luego completaban ejercicios del cuaderno, indluyendo un pareo de definiciones.
Este trio de planes de tutoría me salió de maravilla, ya que pude mantenerlos trabajando por el tiempo establecido sin muchas interrupciones. El truco en esto es sacar todas las ideas, materiales, y manipulativos para ver que te puede funcionar.